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Si buscas mejorar el agua que bebes porque te preocupa tu salud y la de tu familia necesitas conocer:
"Las 6 cualidades imprescindibles para beber agua saludable"

GUÍA GRATUITA

HOGAR Y VIDA COTIDIANA

Sin duda alguna, si hay un electrodoméstico que va a ser fundamental en los hogares en los próximos años este va a ser un buen sistema de tratamiento de agua. 
Tu Sistema de Tratamiento de Agua tiene que filtrar literalmente las sustancias nocivas y dejar pasar las buenas o nutricionales; pero a este producto versátil del hogar debes exigirle que te aporte  aún más beneficios.
El agua es esencial para la vida. De hecho, un adulto medio está compuesto en un 70% de agua. 
Esto significa que tú y tu familia tenéis que aportar continuamente a vuestros cuerpos la cantidad adecuada de agua para disfrutar de una buena salud.   

 

¿Por qué usar un sistema de tratamiento de agua en casa? 

 
Aquí te dejamos las 6 razones principales para  hacerlo y que al mismo tiempo son  sus seis principales beneficios para ti y tu familia.
 
Puesto que consumimos agua a diario, tenemos que prestarle atención y asegurar que nuestras familias beban y usen agua en la que no se hayan colado contaminantes.
 
  Por suerte, esto es exactamente lo que hacen la mayoría de los Sistemas de Tratamiento de Agua.
 
 
  Con la filtración de agua se consigue mucho, pero…
 

 

¿Cuáles son los principales beneficios que debes buscar a la hora de elegir el tuyo ? 

Sigue leyendo para saber más:

1.   Elimina sustancias nocivas

Un buen y adecuado Sistema de Tratamiento de Agua debe de ser  efectivo en la eliminación de al menos  150 contaminantes que pueden tener presencia en el agua , entre ellos, pequeños rastros de microplásticos, moho, metales, virus y bacterias. Es Imprescindible que Destruya eficazmente más del 99,99 % de las bacterias dañinas presentes en el agua potable. ¿Qué significa esto exactamente para ti? ¡Que tú y tu familia podéis disfrutar de agua limpia y de buen sabor, en todo momento!
La contaminación es tal que las plantas de tratamiento de agua no pueden filtrar todas las toxinas que contiene. Desde el gel de baño hasta la cafeína sin metabolizar de nuestro café matutino pueden acabar en las aguas.
A esto se suman numerosas sustancias químicas agrícolas, medicamentos y toxinas producidas por bacterias (como las microcistinas, por ejemplo, que son toxinas nerviosas producidas por cianobacterias de agua dulce).

¿Qué hay en el agua que bebemos, con la que cocinamos o lavamos nuestros alimentos?

 Alrededor de 11.000 nuevas sustancias se registran cada día en todo el mundo procedentes de productos químicos industriales, pesticidas, productos de limpieza o plásticos. 
 Prácticamente todas la sustancias encuentran su camino hacia las aguas naturales y todas pueden acabar formando parte del agua del grifo.
También los fármacos pueden acabar en el agua. Se calcula, como promedio, que en el agua residual se hallan más de 20 fármacos de distinta composición, según el país y el consumo. 
A lo largo y ancho del planeta, se han detectado cantidades significativas de fármacos de consumo frecuente en las aguas:
                -Antidepresivo Prozac (fluoxetina), el antiepiléptico carbamezapina, propanolol (un beta-bloqueante para la insuficiencia cardiaca), antibióticos como el trimetoprim y el sulfametoxazol, reguladores del colesterol, los analgésicos naproxeno y diclofenaco o el antiinflamatorio ibuprofeno.
Las concentraciones (bajas) de estos residuos no suponen un riesgo para la salud humana.
Lo que preocupa a los expertos es que en cada litro de agua podemos encontrar no solo uno de ellos sino varios fármacos y diversas sustancias químicas, que pueden interaccionar entre sí en   un efecto cóctel, y esto sí es peligroso para la salud.
Otro factor a tener en cuenta es el efecto acumulativo en el ecosistema, o cómo la exposición constante a los fármacos de los microorganismos -virus y bacterias del agua- puede generar patógenos resistentes, poniendo en peligro el tratamiento a futuras infecciones.
No menos importantes son los efectos que tienen los residuos de las píldoras anticonceptivas y de terapias hormonales, que siguen activas al llegar al medio ambiente y se combinan con las hormonas naturales, como la progesterona o el estradiol (que en las aguas residuales de grandes ciudades alcanzan niveles muy elevados).
 Los contaminantes de origen industrial del tipo de los disruptores endocrinos, que mimetizan los efectos de las hormonas y pueden alterar el sistema endocrino de los organismos. Varios estudios ya han revelado la existencia de peces con signos de intersexualidad, en los que se da coexistencia de tejido testicular y de ovarios.

 

Resumiendo

Doctores expertos en salud y calidad de agua «la contaminación química es tal, que las plantas de tratamiento no dan a basto para filtrar todas las sustancias perjudiciales que contiene el agua. Desde la cafeína del desayuno hasta el gel de baño pueden acabar en el agua, y a esto se suman sustancias química derivadas de la industria agroalimentaria como los pesticidas, toxinas producidas por bacterias o medicamentos».

¿Cómo puedes beber agua de calidad?

Para descubrir qué contiene el agua del grifo de vuestros hogares, podéis consultar las bases de datos de agua de grifo de vuestro país y ciudad, o pedir un estudio de la calidad del agua del grifo de vuestro hogar al ayuntamiento correspondiente. 
En España, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) suele realizar informes sobre los lugares de España donde se halla la mejor y la peor agua de grifo y hacerlos públicos.
Si queréis beber agua de buena calidad tenéis que Filtrar el agua del grifo.
Idealmente, y especialmente importante en personas con determinadas patologías, deberíais filtrar tanto el agua que vais a beber como el agua con la que vais a cocinar o lavar vuestros alimentos, , pues las toxinas contenidas en el agua pueden ser absorbidas con facilidad por estos últimos.

2.   Deja las sustancias buenas y nutritivas imprescindibles para nuestro organismo

El agua potable contiene un montón de minerales imprescindibles y buenos para nuestro organismo (calcio, magnesio, sodio, hierro, potasio, yodo, zinc, fosforo , selenio etc).
Un buen sistema de tratamiento de agua tras filtrar la misma y eliminar sus contaminantes dejará siempre en el agua esos nutrientes tan importantes. OJO, pues este es sin duda alguna uno de los pecados capitales de la mayoría de los sistemas de tratamiento de agua del mercado como los basados en membranas osmóticas de los cuales debes de huir  para estar tranquilo.   

3.    Minimiza los residuos

 Un buen Sistema de Tratamiento de Agua , reducirá tu huella de carbono ya que no tendrás que ir más a comprar agua. 
Esto significa que te ahorrarás tiempo y desplazamientos y también minimizarás residuos a largo plazo.
Y lo más importante: no debe desperdiciar agua a la hora de su funcionamiento.
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4.    Reduce el uso de plástico

Al usar un sistema de tratamiento de agua, reducirás tu consumo de agua embotellada y contribuirás a frenar la proliferación de plástico de un solo uso. 
Y lo mejor: como ya no tendrás que desplazarte o utilizar bidones de plástico retornables, ayudarás a reducir el impacto que tienen en el medio ambiente. 
Efectivamente, un buen filtro de agua puede ayudar a ahorrar hasta 5.000 botellas de agua de un litro y, a nivel de salud evitaras la posibilidad de “ser agredido” por disruptores endocrinos como el bisfenol A y B o el antimonio  presentes en el agua no tratada adecuadamente.
El agua embotellada NO ES UNA ALTERNATIVA idónea debido al efecto nocivo de los plásticos tanto para la naturaleza como para el ser humano. 
El plástico no es una sustancia inerte, como el vidrio. Contiene sustancias químicas como el bisfenol A (BPA) y los ftalatos, que imitan las hormonas del cuerpo. 
Estas sustancias químicas se pueden filtrar del contenedor de plástico al continente, contaminando el alimento o la bebida de su interior.
Esto es preocupante, ya que incluso concentraciones minúsculas de estas sustancias químicas pueden causar problemas para la salud, como: daño del SNC, mayor riesgo de obesidad, depresión de la función inmunológica, estimulación de las células cancerosas de la próstata, hiperactividad, mayor agresividad y dificultad del aprendizaje, pubertad temprana, disfunción de los ovarios y menor producción de esperma.
El 70 % de los productos de plástico comunes dan positivo para la actividad estrogénica y ese número se eleva al 95 % cuando los productos son sometidos a condiciones reales como lavar platos o utilizar el microondas.
 El calor y la luz solar pueden acelerar la descomposición del plástico, así que evitad tomar el agua de botellas que ya llevan algún tiempo almacenadas o a las que les haya dado el sol, por ejemplo. 
Si no teneis mas remedio para evitar las toxinas químicas en el agua, elegid vidrio en lugar de plástico.
Si dos terceras partes de nuestro organismo son agua, está claro que beber agua de calidad es un tema primordial para la salud y el bienestar.
Por otra parte la naturaleza , 
                                      EL MEDIO AMBIENTE NO SOPORTA MAS PLÁSTICO
Han pasado ya unos años desde que en National Geographic publicamos la famosa portada en la que una bolsa de plástico parecía un iceberg
Una imagen vale más que mil palabras y a partir de aquel momento millones de personas en todo el mundo tomaron conciencia sobre un problema hasta el momento silenciado, obviado, ninguneado: la ingente cantidad de plástico que poblaba los mares de todo el mundo y sus peligros para todas las especies que vivimos en la tierra.
Pues bien, ahora un nuevo estudio publicado en la revista Nature Communications ha comprobado que el problema podría ser todavía más grave de lo que pensábamos hasta el momento. 
Según los científicos del Centro Nacional de Oceanografía (NOC), con Katsiaryna Pabortsava a la cabeza, la masa de microplásticos «invisibles» que se encuentran en las aguas superiores del océano Atlántico es de entre 12 y 21 millones de toneladas, llegando a los 200 millones de toneladas de basura plástica en total en todo el océano que baña el Europa, África y América.

 
Como explica la propia responsable del estudio, la doctora Pabortsava, el problema a la hora de calibrar la magnitud del problema es que, hasta el momento, no se tenían en cuenta todos los tipos de plásticos que llegaban al mar. 
Según las estimaciones en el océano Atlántico se habrían depositado durante los últimos 65 años unas 17 millones de toneladas de plásticos de un tamaño concreto. 
Pero no se tenían en cuenta ciertos tipos de plásticos, como aquellos más pequeños.
Según Katsiaryna Pabortsava , «antes no podíamos realizar el balance entre la masa de plástico flotante que observamos con la masa que creíamos que había entrado en el océano desde 1950. Esto se debe a que estudios anteriores no habían medido las concentraciones de partículas microplásticas ‘invisibles’ debajo de la superficie del océano.
 Nuestra investigación es la primera en haber hecho esto en todo el Atlántico, desde el Reino Unido hasta las Malvinas «.
«Ninguno de los escenarios es bueno. Estamos bebiendo muchos plásticos», declara Indranil Chowdhury, profesor asistente en el Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental de WSU, y autor principal de la investigación que bajo el título Aggregation and stability of nanoscale plastics in aquatic environment se ha publicado esta semana en la revista científica especializada Water Research. 
«Estamos bebiendo varios gramos de plástico cada mes. Eso es preocupante porque no sabes cual será el impacto de este hecho dentro de 20 años»
Los investigadores, entre los que se incluyen los estudiantes de posgrado, Mehanz Shams y Iftaykhairul Alam, examinaron lo que sucede con los plásticos diminutos a nanoescala que se están introduciendo en el medio ambiente acuático y estiman que cada día alrededor de ocho billones de piezas de microplásticos pasan por plantas de tratamiento de aguas residuales y terminan en el medio ambiente acuático. 
Estos pequeños trozos de plástico pueden provenir, por ejemplo, de la degradación de plásticos más grandes o de las microperlas utilizadas en productos de cuidado personal. 
«La investigación mostró que más del 90% del agua del grifo en los Estados Unidos contiene plásticos a nanoescala que son invisibles para el ojo humano», añade Chowdury.
MÁS INFORMACIÓN
INGERIMOS 50.000 PARTÍCULAS DE PLÁSTICO AL AÑO.
https://youtu.be/L0Lc1IkKZB8
 
 

5.    Fácil de mantener 

Un buen sistema de tratamiento de agua  debe de poder disponer de un protocolo automatizado ( si es posible informático ) que gestione con claridad sus periodos de mantenimiento de una forma sencilla y practica para el usuario y sin necesidad de profesionales que encarecen el producto. 
Debe permitirte no  preocuparte y recibir una notificación sobre cuándo hace falta cambiar el filtro siendo  facilísimo cambiarlo.
 

6.    Certificados y Calidad contrastada 

Y por último , ¿Sabías que es muy recomendable que la Calidad de un Sistema de Tratamiento de Agua este contrastada por certificaciones de organismo internacionales de reconocido prestigio en el sector como NSF  ….?

La certificación de NSF* es tu garantía de que el producto ha sido comprobado por una de las organizaciones independientes más prestigiosas de ensayos de productos: desde exhaustivos ensayos de productos y análisis de materiales a inspecciones sin previo aviso a las plantas.

 Todos los aspectos del desarrollo de un producto se evalúan meticulosamente antes de que pueda recibir una certificación de NSF.

*NSF es una Organización para la Salud y Seguridad Pública. Es un organismo independiente acreditado que realiza ensayos, inspecciones y certificaciones de productos.

Calidad Contrastada

 Un buen sistema de filtración de agua debe de tener como mínimo en su haber las siguientes  certificación de NSF International*  y  ajustarse a las normas NSF/ANSI: 42, 53, 55 , 401 , P473 y P477 . Con estas certificaciones y protocolos, puedes tener la tranquilidad de que tu sistema de tratamiento de agua te proporciona agua pura y limpia para ti y tu familia:
 
    1. Norma 42: Mejora el sabor, el olor y el aspecto del agua.
    2. Norma 53: Elimina el plomo y otras sustancias contaminantes orgánicas volátiles.
    3. Norma 55: Ofrece un tratamiento bactericida y desinfectantes adicional al de la desinfección de agua potable de suministro público.
    4. Norma 401: Elimina nuevos contaminantes emergentes procedentes de herbicidas y algunos fármacos.
    5. Protocolo P473: Elimina los contaminantes derivados de sustancias PFOA & PFOS
    6. Protocolo P477: Elimina las cianobactarias tóxicas como las Microcistinas.
Esta Guía ha sido creada para dar luz a aquellas personas que tienen un interés por la salud, el medio ambiente y la sostenibilidad. 
HAZLO SALUDABLE